Convierte tu azotea en un techo verde

18 Jul Convierte tu azotea en un techo verde

Podemos hacer que las grandes ciudades sean más sostenibles (sustentables)  aplicando medidas que generen un impacto medioambiental lo menos negativo posible, a ser posible positivo. La implantación de los techos verdes, preciosas azoteas que se cubren de sustratos de tierra vegetal para que crezcan plantas y sustituyen los materiales tradicionales como las tejas, gravas, piezas cerámicas…etc nos abren camino a un desarrollo sostenible ayudándonos a luchar contra la grave contaminación del aire, devolviendo a la naturaleza el suelo que la construcción ocupa.

Los llamados “techos verdes” nos ofrecen múltiples beneficios como la utilización de los mismos como huertos urbanos, también absorben hasta el 80% de la lluvia evitando posibles inundaciones, regulan las temperaturas actuando como aislantes térmicos manteniendo el fresco en estaciones de calor y el calor en estaciones frías, debido a la gran inercia térmica de la tierra. Las cubiertas ajardinadas en verano, ahorran un 30% de energía. Y por último una función de las más importantes, mejoran la calidad del aire en las ciudades absorbiendo los contaminantes. Además, estos techos, provocan un efecto toldo que reduce el gasto en insonorización absorbiendo las ondas sonoras y reduciendo considerablemente el ruido medioambiental.

Los techos verdes también nos ofrecen otras muchas ventajas como aumentar la biodiversidad pudiendo albergar una gran cantidad de plantas e invertebrados y proporcionando un hábitat adecuado para diversas especies de aves, disminuyen la generación de residuos al aumentar la vida útil de las membranas impermeables y de los sistemas de ventilación, calefacción y climatización, permiten el uso de materiales reciclados en el medio de cultivo y , por último, generan un aumento del espacio público y de relación en construcciones plurifamiliares con la creación de un nuevo espacio de esparcimiento de gran calidad. Este tipo de techos son muy beneficiosos para las personas porque mejoran la calidad del aire, mitigan los efectos del calentamiento global y reducen el estrés que producen las olas de calor. Sobre todo pueden tener beneficios para la salud de adultos mayores que tienden a ser más vulnerables a las enfermedades relacionadas con el calor y la mala calidad del aire.

Para habilitar una azotea y que pueda albergar un techo verde ha de hacerse una cubierta especial para evitar filtraciones de agua al edificio, también seleccionaremos las especies de plantas que vayan acorde con el tipo de clima y hábitat del entorno para que su mantenimiento sea más sostenible, es decir, siempre optaremos por las plantas que broten en el entorno de manera natural.

Según el tipo de vegetación y cuidados del techo verde podemos diferenciar entre techos verdes extensivos o intensivos. Los intensivos son parecidos a jardines o huertos urbanos, con diferentes tipos de arbustos y árboles, necesitan más cuidados como un sistema de regado además del agua de lluvia, su peso puede triplicarse y su coste es más elevado. Los extensivos apenas necesitan cuidados durante el año y están formados mayoritariamente por serum, no necesitan agua, a excepción de la de la lluvia, el sustrato es poco profundo y sus costes son bajos. En las praderas extensivas es importante que no tengan sombra, que siempre les de el sol. Algo muy importante dentro de las praderas extensivas es aprovechar las funciones físicas de la vegetación para proteger al suelo de la erosión y mejorar el agua de las escorrentías.

La instalación de los techos verdes no es exclusiva para grandes edificios, también hay otras alternativas como balcones o pequeñas viviendas.

Aunque parezca que los techos verdes se hayan inventado hace relativamente poco tiempo, en los países escandinavos se llevan usando desde hace siglos. En Alemania se utilizan desde los años 60. El ayuntamiento de Copenhague ha incluido los techos verdes dentro de su Plan Climático, y ha sido la primera ciudad que ha legislado sobre este tema obligando a los edificios de nueva construcción (con tejados de menos de 30 grados de pendiente) a instalar en sus azoteas algún tipo de cubierta verde, lo mismo ocurre con los edificios municipales y otras construcciones civiles, reduciendo así el gasto en aire acondicionado o calefacción y mejorando la calidad de vida de sus habitantes.

Stuttgart, Copenhague, París, Ciudad de México, Buenos Aires, Barcelona o Madrid son algunas de las ciudades que han apostado, en mayor o menor medida, por las cubiertas verdes.

Después de conocer las ventajas y beneficios que nos ofrecen los techos verdes, no se nos ocurre otra manera mejor de darle uso a nuestras azoteas que el convertirlas en un espacio verde dentro de la ciudad, y a ti … ¿te gustaría ver el techo de tu casa convertido en verde?