27 Jul Pérdidas y ahorro energético en casa
Hoy en día no somos lo suficientemente conscientes de lo importante que es el ahorro energético y las pérdidas de energía que se producen en las viviendas mal diseñadas y mal construidas. La forma del edificio, sin pasar por alto que tenga un factor de forma, la orientación de nuestra vivienda, y las estrategias arquitectónicas bioclimáticas serán fundamentales para reducir este despilfarro de energía y conseguir un ahorro energético en casa.
Como punto de partida, comentar, que los políticos deberían dejarse asesorar por los buenos arquitectos urbanistas, hacer ciudad es lo importante, el ahorro energético contribuye a ello, por lo que deberían concienciarse en plantear el diseño de las ciudades tendiendo en cuenta como criterio principal orientar las pastillas de terrenos urbanos en un eje Norte-Sur, quedando las calles principales paralelas al eje Este-Oeste, dejando la mayor longitud de las parcelas perpendiculares a la orientación Sur, orientación de máxima radiación solar, que mediante el diseño inteligente se decidirá cuando y en qué estaciones se deberá captar o repeler energía solar en las orientaciones que decidamos.
¿A rasgos generales, qué orientación es la recomendable en España, para que tu vivienda contribuya al ahorro energético?
- Orientación norte: Esta orientación es recomendable en zonas que son calurosas durante la mayor parte del año, ya que sólo reciben algo de luz directa del sol en los meses de verano a primera hora de la mañana y última del día. La vivienda estará más fresca, por lo que hará muy poca falta gastar energía utilizando el aire acondicionado. Con un diseño bioclimático previo a su construcción se podría prescindir totalmente de la máquina de aire acondicionado.
- Orientación este: Recomendable para viviendas en zonas templadas, tendremos sol desde primera hora de la mañana hasta el mediodía durante todo el año, a partir del mediodía el sol irá dejando de dar directamente, lo que provocará que por las tardes sea más fresca la vivienda.
- Orientación oeste: Esta orientación se adapta muy bien a los climas fríos, ya que la luz del sol incide en la vivienda a partir de pasado el mediodía hasta el atardecer y ayuda a que aumente la temperatura en las horas en las que normalmente se llega a casa después de la jornada de trabajo. La casa estará más fría por la mañana y más caldeada a por la tarde.
- Orientación sur: Es altamente recomendable para zonas donde hace frío la mayor parte del año, la radiación solar da durante la mayor parte del día y en todas las estaciones.
Todo esto es a nivel general, puesto que habrán otros factores que podrán influir en el ahorro energético: sombra arrojada de edificios adyacentes, existencia de protecciones solares mal diseñadas, ubicación de una tipología específica de arbolado que genere sombra arrojada sobre el edificio, cerramientos mal diseñados y construidos…etc.
Algo relevante a destacar es que la orientación de la casa es importante, pero también lo son: las superficies de los huecos, las protecciones solares y que los cerramientos (fachadas) estén bien diseñados con una fachada ventilada, colocando un buen aislante térmico (con el espesor previamente estudiado) en la cámara de aire exterior, y posteriormente el material con más masa e inercia térmica con su posterior revestimiento en la cara interior , y que por supuesto todo el conjunto permita la transpirabilidad, la renovación del aire interior y en consecuencia ahorro energético.
Un diseño bioclimático realizado por un buen profesional puede suponer un ahorro energético de hasta un 70% analizando y proyectando concienzudamente la construcción, la iluminación, el consumo de electrodomésticos, los equipos eléctricos, el aislamiento térmico y también el ahorro de energía en la climatización.
Es importante distinguir entre ahorro energético y eficiencia energética. El ahorro energético es un cambio en los hábitos de consumo que se traduce en un menor gasto de energía, se puede conseguir simplemente bajando el termostato de la calefacción o apagando la luz si no estamos en una habitación; la eficiencia energética, sin embargo, conlleva un menor consumo de energía sin que exista ningún cambio de hábitos del consumidor, es decir, implica una demanda de energía menor en la vivienda que nada tiene que ver con los hábitos de consumo y se puede conseguir empleando bombillas de bajo consumo o construyendo viviendas con demandas de energía muy bajas en las que alcanzaremos el confort térmico teniendo en cuenta el clima, las condiciones del entorno y el diseño que nos ofrezca el proyecto de un arquitecto especializado en arquitectura bioclimática.
Las energías renovables junto con el diseño de una casa, su orientación, materiales de construcción, aislamiento etc, son factores importantísimos que juegan a favor de la eficiencia y ahorro energético de un edificio o vivienda.
En el proyecto de arquitectura de una vivienda bioclimática tendremos en cuenta los siguientes aspectos:
- La geometría y la orientación de la parcela. Qué duda cabe que si la mayor longitud de la parcela está orientada al sur, ayudará al planteamiento bioclimático de la casa.
- La masa de la construcción.
- La integración de las energías renovables.
- La orientación de los ventanales para sacarle el máximo partido a las horas de radiación solar.
- Que tenga una ventilación natural y aislamiento térmico ecológico, para lograr que el propio edificio se autorregule térmicamente.
- Intentar conseguir el máximo nivel de reciclaje de todos los residuos que se generen, como por ejemplo el reaprovechamiento para riego de las aguas grises.
- La utilización de materiales naturales del entorno, que permita ahorrar consumo de energía del transporte de materiales de procedencia lejana.
- Protecciones solares, voladizos, porches y patios interiores, entre otros, son elementos que nos permiten el ahorro energético a la hora de generar fresco.
- La ventilación cruzada razonada, ojo!…no es lo mismo cruzar aire caliente en el interior de una vivienda en verano, que generar fresco de manera natural y sutilmente introducirlo dentro de la vivienda.
- Las superficies de acristalamiento bien diseñadas nos permiten la captación de energía calorífica e iluminación natural , a tener en cuenta para la disminución del consumo eléctrico.
- La vegetación, que será mejor que sea autóctona, junto con la aportación de las características físicas de su tierra, ambas se utilizarán como mecanismos de autorregulación climática.
- El color de la vivienda, los colores claros captarán un 20-30% menos de calor que los oscuros.
- Sistemas constructivos como vías naturales (que no consumen energía) para refrescar la vivienda.
- El diseño y ubicación estratégicas de láminas de agua para refrescar de manera natural.
- Diseño de aperturas de ventanas que ayuden a generar convecciones de aire, junto a sus ubicaciones estratégicas.
Como habéis podido comprobar, hay numerosos factores para conseguir un hogar confortable en el que no se derroche energía y podamos conseguir ahorro energético, pero lo más importante es que deposites tu confianza en un especialista en la materia, un arquitecto que mediante técnicas de bioconstrucción y diseño bioclimático te ofrecerá las soluciones necesarias para que tu vivienda sea una vivienda saludable, sostenible y de calidad sin que ello repercuta en un aumento del coste, ni del tiempo de construcción.
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